Era todo un acontecimiento, despues de casi un año, mimandolo y cebandole, al pobre marrano le llegaba, su SANMARTIN. la de ahora esto no lo ha vivido, pero los niños de entonces, cuando escuchabámos chillar a un marrano, íbamos corriendo y ayudábamos a sujetarlo, para después reclamar la vegiga, que inflávamos y ya teniamos una pelota para jugar hasta que se rompia, ya que no duraba mucho, pero era una diversión para nosotros. Durante la matanza, familia y vecinos colaboraban en las faenas, desde ... (ver texto completo)
Es díficil resumir en poco tiempo, todo el proceso de la matanza, pero delo que más me acuerdo era de la familia y de los matarifes y de mi madre cuando pinchaban al marrano con el lebrillo, moviendo la sangre para que no se cuajase y asi se utilizaba para la morcilla. y yo me lo pasaba bomba cuando se ponía el marrano en la artesa y le ponian el agua hirviendo para quitarle el pelo. Recuerdo que cuando terminaban los matanceros, mi madre les hacía una tapa de asadura con vino y yo no me resistía ... (ver texto completo)