EL CUENTO DE ESTA VIDA; DEL LISTO Y DEL POBRE QUE NO ESTUDIO
El cuento del que mucho estudió, todo en cuento quedó, si o no. A mis 85 años de edad el tiempo debo pasar, de lo que de unos y otros escuché, vi y no comprendí, el royo de cada cual. ¡Que en la política está! O en otro lugar, que pocos venimos a comprender su verdad, donde está, ya que su salario cobró por la charla que dió, que el viento se llevó.
La inteligencia del que mucho estudió. Su salario mensual cobró y todo en cuento quedó. De lo mucho que estudió, del campo y el mar se alimentó. Desgracia que pasó. Ya que su riqueza en bienes aumentó, que de funcionario entró. Sábados, domingos no trabajó, y todas las fiestas lo mismo le pasó. Y el resto de días no sé si se presentó. Ya que el montón de papeleo en la mesa creció. El campesino si no trabajó nada se le pagó.
El barco que se hundió, por desgracia no se encontró. Con lo fácil que seria de encontrar. Si antes de echarlo al mar en su cubierta se hubiese colocado una boya con unos cuatro mil metros de cable, que no se pueda oxidar. Fácil de desenrollar. Con luces de batería y solar, para que no deje de alumbrar. Ya que en el fondo del mar esta destruido o normal. El submarino de Argentina ya se vino a encontrar, del que no vino a estudiar.
La Humanidad al cielo llegó y todo el Mundo se revolucionó, que la desgracia se presentó con tal y tal mandatario de ésta y otra nación, con el armamento de destrucción que cada cual se inventó. Ya que el uno y el otro quieren tener razón con el armamento de destrucción que uno y otro almacenó. No comprendieron que ninguno tiene razón. Ya que el uno y el otro vivió gracias al trabajador del campo y del mar, que fue el que produjo su alimentación, y no el armamento que el uno y el otro amontonó.
Tal y tal político que mandó, lo mucho que prometió. En Cataluña quieren tener razón. A otra nación huyó con la falsedad que se inventó, del uno y del otro que le votó, diciendo que es presidente de la España que dividió, con el royo que se inventó. Desgracia que en Cataluña pasó con el dinero que se malgastó. Del que pagó la contribución, que al pobre y al millonario en Cataluña se le cobró. ¡Qué maldición!
Los Reyes magos, que este año 2.018 me felicitaron, el cual terminamos de estrenar este cuento me contaron, de tal y tal político que mandó, que unos y otros se dejen de criticar para coger mando y capital. Que gracias al trabajador del campo y del mar se pueden alimentar y no criticando al adversario, que quiere coger mando y capital fastidiando a la administración de cualquier Aldea, pueblo, o ciudad. Que endeudada esta cada año más, que tal y tal político se quiera llamar, para coger mando y capital y colocar al amigo que le vino a votar. ¡Desgracia que sucedió en ésta y otra población!
Melchor, Gaspar y Baltasar me dijeron que no dejará de estudiar para ser autoridad, y que obedezca a mis padres y demás personas que me traten con dignidad. Tal como ellos me deben tratar, que el próximo año más regalos me traerán si obedezco a mis Padres y a los demás, ya que más regalos me traerán. Tantos, que yo pueda regalar.
ESTE CUENTO SE TERMINO. QUE COMO CUENTO SE ESCRIBIÓ.
MARINO RAMÍREZ TRASSIERRA. ESCRIBIÓ, EN CUENTO QUEDO, MENOS LA PAGA QUE EL POLÍTICO COBRO Y A ESTA Y A OTRA POBLACIÓN MÁS ENDEUDADA DEJO. DESGRACIA QUE PASO. YA VERAS ... (ver texto completo)
El cuento del que mucho estudió, todo en cuento quedó, si o no. A mis 85 años de edad el tiempo debo pasar, de lo que de unos y otros escuché, vi y no comprendí, el royo de cada cual. ¡Que en la política está! O en otro lugar, que pocos venimos a comprender su verdad, donde está, ya que su salario cobró por la charla que dió, que el viento se llevó.
La inteligencia del que mucho estudió. Su salario mensual cobró y todo en cuento quedó. De lo mucho que estudió, del campo y el mar se alimentó. Desgracia que pasó. Ya que su riqueza en bienes aumentó, que de funcionario entró. Sábados, domingos no trabajó, y todas las fiestas lo mismo le pasó. Y el resto de días no sé si se presentó. Ya que el montón de papeleo en la mesa creció. El campesino si no trabajó nada se le pagó.
El barco que se hundió, por desgracia no se encontró. Con lo fácil que seria de encontrar. Si antes de echarlo al mar en su cubierta se hubiese colocado una boya con unos cuatro mil metros de cable, que no se pueda oxidar. Fácil de desenrollar. Con luces de batería y solar, para que no deje de alumbrar. Ya que en el fondo del mar esta destruido o normal. El submarino de Argentina ya se vino a encontrar, del que no vino a estudiar.
La Humanidad al cielo llegó y todo el Mundo se revolucionó, que la desgracia se presentó con tal y tal mandatario de ésta y otra nación, con el armamento de destrucción que cada cual se inventó. Ya que el uno y el otro quieren tener razón con el armamento de destrucción que uno y otro almacenó. No comprendieron que ninguno tiene razón. Ya que el uno y el otro vivió gracias al trabajador del campo y del mar, que fue el que produjo su alimentación, y no el armamento que el uno y el otro amontonó.
Tal y tal político que mandó, lo mucho que prometió. En Cataluña quieren tener razón. A otra nación huyó con la falsedad que se inventó, del uno y del otro que le votó, diciendo que es presidente de la España que dividió, con el royo que se inventó. Desgracia que en Cataluña pasó con el dinero que se malgastó. Del que pagó la contribución, que al pobre y al millonario en Cataluña se le cobró. ¡Qué maldición!
Los Reyes magos, que este año 2.018 me felicitaron, el cual terminamos de estrenar este cuento me contaron, de tal y tal político que mandó, que unos y otros se dejen de criticar para coger mando y capital. Que gracias al trabajador del campo y del mar se pueden alimentar y no criticando al adversario, que quiere coger mando y capital fastidiando a la administración de cualquier Aldea, pueblo, o ciudad. Que endeudada esta cada año más, que tal y tal político se quiera llamar, para coger mando y capital y colocar al amigo que le vino a votar. ¡Desgracia que sucedió en ésta y otra población!
Melchor, Gaspar y Baltasar me dijeron que no dejará de estudiar para ser autoridad, y que obedezca a mis padres y demás personas que me traten con dignidad. Tal como ellos me deben tratar, que el próximo año más regalos me traerán si obedezco a mis Padres y a los demás, ya que más regalos me traerán. Tantos, que yo pueda regalar.
ESTE CUENTO SE TERMINO. QUE COMO CUENTO SE ESCRIBIÓ.
MARINO RAMÍREZ TRASSIERRA. ESCRIBIÓ, EN CUENTO QUEDO, MENOS LA PAGA QUE EL POLÍTICO COBRO Y A ESTA Y A OTRA POBLACIÓN MÁS ENDEUDADA DEJO. DESGRACIA QUE PASO. YA VERAS ... (ver texto completo)