Que buenos que se apuntan más del
pueblin para recordar tiempos pasados, que no serían mejores, pero que se recuerdan con cariño.
Figaredo cambió mucho, pero tan despacio que los que vivimos aquí casi no lo notamos, la
calle del
Cine, no se si le cambiarán el nombre ya que este no existe, ahora hay pisos. Lugar de pasada para ir a Ricardo donde era “obligatorio”
comprar en María los bocadillos de patates frites con salsa de torera. La
tienda de Piedad, la zapatería de Pimpo, la barbería de Pepe
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