Gratuidad
Tú dices a menudo: yo daré sólo a quien se lo merece.
Los árboles de tus jardines, no hablan así,
ni los corderos de tus pastos.
Dan a fín de vivir, porque retener es perecer (K. Gibran)
Tú dices a menudo: yo daré sólo a quien se lo merece.
Los árboles de tus jardines, no hablan así,
ni los corderos de tus pastos.
Dan a fín de vivir, porque retener es perecer (K. Gibran)