El verano pasado escribí un pequeño artículo en la revista de las fiestas en el que hablaba de mi bachillerato en Aguilas y envié una foto de los que lo terminamos en el año 1948. Gracias a el he recibido algunos mernsajes de amigos de entonces y ahora cuando vaya dentro de unos dias voy a tener la alegría de encontrarme con Antoñita Pallarés Sánchez, muy buena amiga a la que hacía muchos años que no veía, y también a Celia Matrán, que ahora vive en Cartagena y que se encuentra bastante delicada. ... (ver texto completo)