Es al revés, contradictorio amigo de los silogismos: antes bajabas al río desde la Tuíza o desde el coto por el camino del molino, perfectamente limpio y transitable, para personas, para animales y para carros; también podías bajar por un sendero más abrupto que mantenían abierto pescadores y bañistas.
Ahora, no. A no ser que bajes reptando por debajo de zarzas, hiniestas y brezos de dos metros de altura.
Tampoco hace falta que te líes tanto con ovillos y silogismos. La realidad de cada instante ... (ver texto completo)
Ahora, no. A no ser que bajes reptando por debajo de zarzas, hiniestas y brezos de dos metros de altura.
Tampoco hace falta que te líes tanto con ovillos y silogismos. La realidad de cada instante ... (ver texto completo)