Bajo el
coro, en uno de los laterales, se abre la
capilla del
Santo Cristo. Su
retablo neogótico lleva al centro la talla de un crucificado del siglo XVI, ya muerto, que tienen a ambos lados dos pinturas de la
Virgen María y de
San Juan. En la base del retablo destacaun magnífico descendimiento de Jesús de la
cruz a los brazos de su madre, tallado a finales del siglo XV, de estilo
gótico-flamenco, de gran valor. En la parte izquierda de la capilla, se encuentra la
pila bautismal.